¡Nuestra intención es hablarte desde la profesionalidad y la transparencia y justamente por eso hoy hablaremos de los casos en los que NO SE TIENE QUE HACER EJERCICIO!
- Como sabemos, el ejercicio es un gran aliado para combatir los efectos secundarios de los tratamientos que curarán la enfermedad, quimioterapia, radioterapia e inmunoterapia, pero hay casos en los que no se podrá entrenar.
- A continuación, detallamos los casos de contraindicaciones absolutas, tales como tener:
1. Fiebre
2. Taquicardia
3. Tener la tensión descompensada (muy alta o muy baja).
4. Dolor agudo
5. Tener un hemograma con los valores alterados cuáles:
Hematocrito: <35%
Hemoglobina <10g/dl
Plaquetas <20.000m3
Leucocitos totales <3500Ul
6. Periodo NADIR (recuentos sanguíneos de los valores de leucocitos y
plaquetas, muy bajos; lo cual suele suceder alrededor de los 10 días después de la quimioterapia).
7. Neutropenia (riesgo más elevado de infección)
8. Cardiopatía grave
9. Fatiga excesiva.
10. Tener la saturación de oxígeno por debajo del 87%
- ¿Y, en cuanto a las precauciones, cuáles se deben tener?
Existen algunos signos y síntomas a los cuales hay que prestar especial atención durante el entrenamiento:
1. Si un ejercicio te causa dolor, se deberá cambiar por otro que no provoque.
2. Comunicar al entrenador, en caso de que haya un dolor que va en aumento con el ejercicio.
3. Tener especial atención en caso de tener anemia severa.
4. Si hay Neuropatía periférica causada por los tratamientos, debemos evitar ejercicios con riesgo de caída y altos impactos.
5. Si hay fatiga, tenemos que introducir progresivamente el ejercicio aeróbico.
6. Si se padece Osteoporosis, realizar ejercicios seguros, donde el riesgo de caída se minimice al máximo.
7. Si hay metástasis ósea, realizar ejercicios que no causen dolor y evitar compresiones vertebrales.
Como ves, no es fácil preparar una rutina de ejercicio para un paciente oncológico, requiere de mucho conocimiento técnico y de un profesional especializado, que pueda prestar atención a todos estos aspectos del entrenamiento.
Te recomendamos que valores siempre ponerte en manos de alguien competente. Un entrenador generalista NO tiene la formación y las herramientas para poder tratar con un paciente oncológico.
También te recomendamos que avises a tú médico oncólogo siempre que notes alguna sensación anormal en tu cuerpo.
- ¿Y el superviviente, que deberá tener en cuenta?
- Si eres superviviente, las precauciones serán las mismas, pero con algo más de libertad a la hora de entrenar, sin olvidar que es fundamental conocer y escuchar nuestro cuerpo.
En cuanto a las contraindicaciones, también son las mismas que las del paciente que está en tratamiento activo, salvo el periodo NADIR y la saturación de oxígeno, que se trabajará mínimo en 89-90%, nunca por debajo.
- Bueno, se acabó esta pequeña recopilación de recomendaciones y esperamos que haya sido muy útil, no obstante, puede que algo te suene a chino, ya que tratar a un paciente oncológico a través del ejercicio no va de recomendar hacer 4 sentadillas, sino que todo tiene que estar medido milimétricamente.
Hasta el próximo articulo 🙂
